El Acuerdo por el Cusco fue elaborado por la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza y el Grupo Impulsor por la Descentralización del que es parte el Centro de Estudios y Prevención de Desastres – Predes, fue consensuado con organizaciones sociales, sociedad civil, representantes del Estado, y finalmente validado en reuniones bilaterales con cada candidato y sus equipos técnicos.

La primera dimensión contemplada en el Acuerdo por el Cusco es la social, buscan priorizar la reducción de la anemia y la desnutrición crónica infantil, garantizar el acceso y calidad de los servicios educativos, disminuir la violencia contra el grupo familiar, y proteger a las poblaciones más vulnerables garantizando sus derechos.

La Dimensión Ambiental Propone mejorar la gestión ambiental regional, el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales, acciones de adaptación frente al cambio climático, así como la prevención y reducción del riesgo de desastres en la región de Cusco. La Dimensión Económica promueve el fortalecimiento de la agricultura familiar y seguridad alimentaria, la promoción de actividades económicas, turismo, y conectividad vial, entre otras.

Asimismo, en la Dimensión Institucional plantea indicadores bajo una política de prevención de la corrupción con participación ciudadana, rendición de cuentas; es decir, una apuesta por la transparencia e integridad en la gestión pública.

 La Coordinadora  Regional de la Mesa de Concertación para la Lucha  Contra la Pobreza, Amparo   Vargas Flores , manifestó su expectativa  en que  la próxima gestión de gobierno regional  Cusco asuma con responsabilidad su  trabajo  y  logre alcanzar o superar las metas planteadas en el Acuerdo; además, exhortó  a la  población  en general, a la  sociedad civil, a los  representantes del Estado  y al Comité Ejecutivo Regional a trabajar de manera conjunta y articulada en el  seguimiento concertado durante  el periodo  de gestión 2023 al 2026.